Aunque la anciano parte de las Iglesias cristianas se declaran trinitarias, existen también Iglesias no trinitarias que confiesan alguna de las otras modalidades interpretativas.
Si aceptablemente la enumeración de los dones puede variar de unos autores a otros y entre distintas confesiones, existe un amplio consenso en cuanto a su excelencia y magnanimidad.
Algunos contienden que solamente los doce apóstoles recibieron el Espíritu Santo, pero se puede demostrar que esto es incorrecto:
En tanto que aliento, se puede sostener figuradamente que «deje». En tanto que fuerza creadora y vivificante, se puede afirmar que «crea» y «mantiene creado» el mundo.
Hay muchos malentendidos en cuanto al Espíritu Santo. Algunos lo consideran una fuerza mística; otros piensan que es el poder impersonal de Todopoderoso para exceptuar a personas.
La experiencia de los samaritanos demuestra que individuo puede creer hasta cierto punto e inclusive puede bautizarse en agua y todavía no admitir el Espíritu.
Ofrece sabiduría y discernimiento en decisiones diarias. Los creyentes pueden apelar a Él para obtener claridad en momentos de duda o confusión. Su consejo se manifiesta a través de la oración y la repaso de la Sagrada escritura, donde proporciona entendimiento sobre la voluntad de Jehová.
Cada una de estas personas es plenamente Dios, compartiendo la misma esencia divina, pero funcionando de forma distinta en sus relaciones y roles.
Algunas personas se burlaron de los discípulos porque no podían entender el aberración de las lenguas y lo atribuyeron a la turbación.
En el Espíritu de Alá hay arbitrio para ser libres de la opresión del enemigo y del poder del pecado y de la muerte. La decisión que el Espíritu Santo nos da, es una que nos ayuda a vivir la vida plena en Jesús, agradándole en todo y sirviéndole con Gozada.
Los Hechos es el único volumen en la Sagrada escritura que contiene relatos históricos espiritu santo de las personas que recibieron la experiencia del nuevo origen en la iglesia neotestamentaria e incluye todos los relatos del bautismo cristiano en agua y del bautismo del Espíritu Santo.
Es de esta modo que muchos de los grupos pentecostales clásicos actuales afirman que la evidencia primero para aceptar el Bautismo en el Espíritu Santo es el hablar en nuevas lenguas.
El movimiento Santidad de los abriles 1800 enseñaba que había una segunda obra de Humor posteriormente de la conversión que se llamaba la santificación y por medio de la cual una persona es purificada completamente de sus pecados.
Estos pasajes demuestran que el bautismo en el Espíritu es una experiencia Positivo, tangible y acondicionado para todos los creyentes. No es un mero simbolismo, sino un armonía sobrenatural con Alá que transforma la vida del cristiano.